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Uno de los golosos placeres que más extraño, debido a los cambios que hice en mis hábitos alimenticios, es comerme un rollo de canela caliente a cualquier hora del día. Por esto hoy decidí probar una nueva receta, que resultó increíble. No tiene azúcar, ni harina de trigo procesada, ni huevo, y en menos de 30 minutos pude calmar el antojo que tenía. Espero la disfrutes tanto como yo, advierto que es adictiva. Buen Provecho.
Ingredientes
Para entre 12 y 14 mini rollos
Masa
1 1/2 tazas de harina de trigo integral
½ taza de harina de almendras
1 cucharadita de panela rallada
1 cucharadita de polvo de hornear
1/4 cucharadita de sal
3/4 taza de leche de almendras
Relleno
2 cucharadas de aceite de coco fundido
1/4 taza de panela rallada
2 cucharaditas de vainilla
Glaceado
1 cucharada de panela rallada
1 cucharada de miel de agave
½ taza de leche de almendras
Preparación
Precaliente el horno a 180 C. En un recipiente hondo mezcle las harinas, la panela, el polvo de hornear y la leche de almendras hasta formar una masa compacta. Sobre una mesa enharinada, estire la masa formando un rectángulo de ½ cm de grosor. (la mesa se puede pegar fácil a la mesa y al rodillo, por eso se debe usar harina extra sin excederse para que no quede muy seca)
Encima del rectángulo esparza el aceite de coco con ayuda de una brocha y cubra con la panela rallada y la canela del relleno. Enrolle y corte haciendo los mini rollitos de 2 cm de alto. Engrase un moldo para mini muffins y disponga cada uno adentro. Hornee durante 12 minutos.
Para el glaceado cocine todos los ingredientes a fuego medio hasta que se forme una miel durante aproximadamente 10 minutos. Cubra con este los rollitos calientes
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