El placer sexual ha sido a través de los tiempos, codiciado y anhelado por hombres y mujeres, tal vez por esto, siempre hemos buscado la ayuda de pócimas, sustancias y alimentos que estimulen y abran las puertas al deseo y goce erótico, pero claro, estas no funcionan sin las caricias, la sensualidad y el coqueteo.
Las ganas empiezan en el cerebro, quien rápidamente las dirige hacia el resto del cuerpo, estimulando y encendiendo la pasión. Si comemos algo, convencidos de que va a tener ese efecto que nos sube la libido, seguramente va a funcionar. Hoy quiero tentarlos con uno de mis ingredientes favoritos, el adictivo y excitante Chocolate.
Marilyn Monroe decía, “los diamantes son el mejor amigo de la mujer” y claro que tenía razón, no conozco una sola, que no se deslumbre, desfallezca y seduzca por el brillo de un diamante, pero seamos sinceros, no son regalos de todos los días, por esto creo firmemente que los chocolates son el mejor amigo de la mujer, el sabor de un trozo derretido y cremoso, me induce al éxtasis total.
Por supuesto que también es placentero para los hombres, tanto así que el arma secreta del célebre Casanova, para la seducción y complacer con éxito en la cama a sus amantes, era el excitante chocolate.
Cuando lo muerdo, inmediatamente en mi organismo hay una explosión de sensaciones que a veces son difíciles de describir. El chocolate abre el apetito al placer, su sabor, su aroma estimulan los sentidos, intensificando actividades placenteras como hacer el amor y todo esto, gracias a uno de sus componentes la serotonina, bien llamada “la hormona del placer” levanta el ánimo y nos hace sentir más felices y eufóricos, con sensación de bienestar y deleite. Por supuesto, si no agregamos imaginación, fantasía, deseo y seducción, no tendrá ningún efecto, igual que con el viagra, pero sin los riesgosos y azulosos efectos secundarios.
La mezcla de besos, caricias, palabras dulces, risas y juegos tienen sabor a chocolate. ¿Existe acaso algo más erótico que disfrutarlo con esa persona que despierta tantos apetitos?
No se resista, ¡déjese tentar!
Quiero tentarlos con una fácil y deliciosa receta, perfecta para un preámbulo en una noche especial y porque no protagonista de los besos y caricias.Pique finamente 600 gramos de chocolate (mi favorito es el semiamargo porque no me hostigo, prefiero empalagarme con dulces besos) y póngalo en un recipiente hondo. Lleve a ebullición 1/4 de taza de leche, 2 cucharadas de crema de leche y ½ taza de azúcar pulverizado. Vierta sobre el chocolate y revuelva, acariciándolo suavemente con una cuchara. Finalmente agregue 60 gramos de mantequilla fría y mezcle hasta obtener una textura brillante, untuosa y cremosa. ¿Ya se antojó?
Me gusta acompañar esta salsa con frutas frescas como, fresas, trozos de banano, peras, manzanas y jugosos cascos de naranja.
No se le ocurra usar cubiertos, úntese, chúpese los dedos, juegue con su pareja y deje que la imaginación y fantasía sean sus invitados especiales.